Nieve

¡Aaahh! Ya estamos de vuelta, después de la navidad. Otra vez a currar de manera "normal", otra vez a... bueno, ya sabéis.

Feliz de todo a todos, sobre todo a tí, querida abuelita.

Titulo esta entrada como "nieve" porque querría hablar algo sobre este hache dos o solidificado que cae de los cielos.

Recuerdo que cuando era najo, me molaba mazo (¡Joder, parezco Camilo Sesto!) el tema de la nieve. Que nevara significaba una probabilidad bastante suculenta de no ir al cole, además de diversión garantizada hasta que no te respondieran los dedos de las manos, y en ocasiones, los de los pies.

Pero ahora, ¡Ay, amigo, ahora! Ahora es totalmente distinto. Que nieve significa una putada. Porque te tienes que mover. No sé como cojones hemos llegado a este punto en el que tienes que coger el coche, el avión o cualquier otro transporte para llegar a otro sitio, quieras o no quieras. Somos esclavos del transporte, y la nieve no ayuda mucho al transporte. Y menos en este pais, que nieva dos dias al año (una media ponderada entre lo que nieva en Santander y en Almería) y evidentemente no tenemos la misma destreza que los noruegos en estos temas.

El típico gilipollas que se cree más que nadie. Luego pasa lo que pasa

Bueno, que esto era una entrada para presentarme con el año nuevo, saludaros a todos (besito para ellas, abrazo para ellos) y de paso quejarme de la nieve, que me dejó ayer unas cuantas horas en el aeropuerto.

Saludos y de nuevo feliz de todo a todos.